viernes, 30 de abril de 2010

Sentada

Ésta noche me senté un buen rato en la puerta viendo al cielo, como si mágicamente fueran a llegarme todas las respuestas a mis preguntas.Desafortunadamente no llegó ninguna respuesta.
Este mes se cumplirán cinco meses de haber regresado a mi casa y me ha sido difícil adaptarme, hace mucho que no pasaba tanto tiempo aquí y sin hacer nada. Últimamente me frustro mucho, hasta ahora no he avanzado en mi búsqueda de empleo y eso sumado a que sigo dudando de que haya escogido la carrera adecuada no ha sido de mucha ayuda es muy difícil encontrar trabajo en ésta ciudad al menos para una carrera como la que escogí y me doy cuenta que con la maestría que quiero estudiar me van a quedar dos opciones: trabajar en un museo o ser maestra, las dos me agradan pero entrar en el INAH es complicado y ser maestra no es muy bien pagado y necesito algo que por lo menos me de para vivir,ja.
Los últimos meses no he podido encontar mi lugar en la casa ni en celaya, no puedo descubrir que papel desempeño aquí,hace algunos años mi papel era el de la hija estudiante que nunca estaba y ahora soy la sombra número 25 que habita la casa.
Probablemente todo es consecuencia de todos los cambios recientes, pase de estudiante a desempleada, de vivir por mucho tiempo fuera de casa a no salir, de relacionarme con mucha gente a apenas ver gente.

Como resultado de todo lo que pasa y no puedo manejar, de todo lo que puedo ser y no quiero y lo que quiero ser y no se da, decidí empezar cambiando cosas pequeñas, superficiales y hasta tontas porque tal vez no sean de mucha ayuda.

Aunque ninguna respuesta mágica a todas mis dudas apareció lo que sí sé es que necesito hacer muchos cambios en mi vida y no sólo superficiales. Necesito ser más determinada, arriesgarme más, también hay muchas actitudes que cambiar, cosas que aprender y salir de casa de mis papas aunque sea con unos cuantos pesos en la bolsa y una maleta llena de sueños por cumplir.

viernes, 23 de abril de 2010

No me arrepiento de nada

Desde la mujer que soy,
a veces me da por contemplar
aquellas que pude haber sido;
las mujeres primorosas,
hacendosas, buenas esposas,
dechado de virtudes,
que deseara mi madre.
No sé por qué
la vida entera he pasado
rebelándome contra ellas.
Odio sus amenazas en mi cuerpo.
La culpa que sus vidas impecables,
por extraño maleficio,
me inspiran.
Reniego de sus buenos oficios;
de los llantos a escondidas del esposo,
del pudor de su desnudez
bajo la planchada y almidonada ropa interior.
Estas mujeres, sin embargo,
me miran desde el interior de los espejos,
levantan su dedo acusador
y, a veces, cedo a sus miradas de reproche
y quiero ganarme la aceptación universal,
ser la «niña buena», la «mujer decente»
la Gioconda irreprochable.
Sacarme diez en conducta
con el partido, el estado, las amistades,
mi familia, mis hijos y todos los demás seres
que abundantes pueblan este mundo nuestro.
En esta contradicción inevitable
entre lo que debió haber sido y lo que es,
he librado numerosas batallas mortales,
batallas a mordiscos de ellas contra mí
-ellas habitando en mí queriendo ser yo mismatransgrediendo
maternos mandamientos,
desgarro adolorida y a trompicones
a las mujeres internas
que, desde la infancia, me retuercen los ojos
porque no quepo en el molde perfecto de sus sueños,
porque me atrevo a ser esta loca, falible, tierna y vulnerable,
que se enamora como alma en pena
de causas justas, hombres hermosos,
y palabras juguetonas.
Porque, de adulta, me atreví a vivir la niñez vedada,
e hice el amor sobre escritorios
-en horas de oficinay
rompí lazos inviolables
y me atreví a gozar
el cuerpo sano y sinuoso
con que los genes de todos mis ancestros
me dotaron.
No culpo a nadie. Más bien les agradezco los dones.
No me arrepiento de nada, como dijo la Edith Piaf.
Pero en los pozos oscuros en que me hundo,
cuando, en las mañanas, no más abrir los ojos,
siento las lágrimas pujando;
veo a esas otras mujeres esperando en el vestíbulo,
blandiendo condenas contra mi felicidad.
Impertérritas niñas buenas me circundan
y danzan sus canciones infantiles contra mí
contra esta mujer
hecha y derecha,
plena.
Esta mujer de pechos en pecho
y caderas anchas
que, por mi madre y contra ella,
me gusta ser.

Gioconda Belli

sábado, 17 de abril de 2010

Burbuja

Hace días que no salgo de mi casa, que no veo la luz del sol, podría decirse que tengo al menos dos semanas viendo sólo la luz artificial del foco de mi sala. Casi diario he salido de noche al patio a ver las estrellas, hay un viento tan suave que tiene algo de calidez. Cuando las noches son así me hacen desear estar en la playa y olvidarme de todo, sentir la arena en mis pies y fingir que al menos por ese instante no existe nada más en el mundo.
Sé que mi encierro no es bueno pero aún no estoy lista para el mundo real, ese dónde tienes que pasar ocho horas diarias haciendo las mismas tareas tediosas día tras día, en el que la gente te encuentra y te pregunta si ya terminaste de estudiar y si trabajas. Aquí es como si nada pasara, nada de eso importa tengo libros que leer, montones de revistas, hago algo de ejercicio por las mañanas, me arreglo y pierdo tiempo en las redes sociales, así es como funciona mi pequeño mundo dentro de mi burbuja. A veces me aburro y me dan ganas de salir, de ir a lugares conocidos o nuevos pero sin compañia y sentarme sola y patética en una banca del jardín o en un café y me invade una sensación de querer huir de todo como si en otro lugar existiera ese mundo que hay en mi cabeza un mundo dónde no hay que pasar ocho horas en un trabajo insoportable, en el que no tienes que dar explicaciones absurdas y lo único que tienes que hacer es deambular por las noches sintiendo la arena bajo tus pies y dejar que ese viento cálido te envuelva, un lugar dónde sólo tienes que disfrutar la vida porque nada más importa.

jueves, 8 de abril de 2010

Dejalo ir

Hoy me pregunto por qué dejamos que mueran tantas cosas en nuestras vidas, una amistad, una relación, un sueño; es más fácil dejarlo ir o pretender que nunca existió que preocuparse o mas bien ocuparse en mantenerlo vivo.
Hay momentos en los que se tiene que escoger entre seguir un sueño o lo que puede volverse una realidad, amistades que se van deteriorando con el tiempo por falta de contacto y no nos preocupamos por reanudarlo a veces por desidia,otras veces porque no nos interesa. Con las relaciones no es muy diferente puede ya no gustarte como va la relación, perder el interes pero no lo dices ni haces algo para que las cosas mejoren y cuando lo enfrentas solo es para terminarla.
Con los sueños puede ser que algún día con suerte y determinación te decidas a recuperarlos aunque puede ser difícil porque algunos ya podrían estar fuera de lugar. Las amistades y las relaciones son lo más complicado porque se rompen vínculos muy importantes, llegan nuevas personas a ocupar esos lugares y puede ser que esas nuevas amistades se conviertan en tu familia y esa nueva relación en el "amor de tu vida" y a veces a pesar de que sigues con tu vida te detienes por un segundo y te preguntas: y si hubiera seguido mis sueños desde un principio?, si reanudara esa amistad o si no la hubiera perdido?, hubiera valido la pena seguir con la relación? pero ninguna de esas preguntas tendrá respuesta porque el hubiera y las suposiciones no son sólo más que eso, nunca sabremos si hubiera sido mejor o peor, esta es la única realiad que tenemos y para bien o para mal hay que vivir con las consecuencias de nuestras decisiones.

viernes, 2 de abril de 2010

Situación Sentimental: Soltera

Curiosamente el otro día mis pocas conversaciones estuvieron dirigidas a mi soltería, más de un amigo me preguntó: ¿cómo,ya no?!!!, ¿y cómo estás con eso?, y en el amor,¿cómo te va? y demás preguntas similares a las que respondí: así es, estoy muy bien, me va bien estoy soltera y con eso vienen frases como: es mejor estar soltera (me lo dijo una amiga casada,jajaja) o la de: ya buscate otro novio. Creo que tengo amigos que se preocupan más que yo porque no salgo y no estoy interesada en hacerlo pero es que estoy feliz así.
Personalmente no creo en la teoría de: un clavo saca otro clavo, habrá a quienes les funcione o les haya funcionado pero siento que a mi me hace falta estar sola, nada más de pensar en salir con alguien me da hueva porque tienes que pensar: ¿qué me pongo?,¿le gustará?,¿a dónde vamos?,buscar tema de conversación con alguien a quien apenas conoces,etc,etc. Además de que pienso que saltar de una relación a otra o comenzar a salir con fines románticos otra vez no se debería de hacer si no has sanado todo lo anterior.
Ser soltera o no tener una relación, no es malo o motivo de tristeza, a mi me ha hecho querer hacer muchas cosas, ver hacía lugares que no había pensado y replantearme otros aspectos de mi vida. Tengo muchos planes, estoy emocionada con lo que quiero hacer, ilusionada con que todo salga mas o menos parecido a cómo lo imagino, no podría decir que exactamente igual porque si hay algo que me ha enseñado la vida es que tus planes nunca saldrán a la perfección.
Sigo pensando que el amor es bonito,maravilloso aún no me he desilusionado y podría ser que algún día llegue si es que así debe de ser.